("Sendero" . Oleo sobre Lienzo - Berruga)
Yumeji's Theme
He caminado hoy por un sendero al que no tenía acceso y que no conocía a pesar de encontrarse justo detrás de la pared que se vislumbra tras la ventana.
Cuando ya atardecía y los gorriones mantenían la habitual batalla vespertina para escoger el mejor lugar en donde dormir entre la yedra que trepa por mi ventana, salí fuera y sin pensarlo me adentré en el.
Nunca mis pies lo habían pisado. Era un camino casi estrecho, de tierra dura por la humedad y las aguas caídas en los últimos días, parcialmente cubierto de verdina, como la que de niña extraía del corral de mi casa para alfombrar el Belén. Olía a humedad y a invierno.
De cuando en cuando mis pies pisaban las hojas ya muertas de las acacias y las jacarandas, tan verdes y lustrosas en verano. Todo era marrón y ocre. Por el horizonte unos atisbos de niebla parecía que se acercaban. Yo seguí caminando aún sin saber hacia cual sería el final, o hasta donde me llevaría el serpenteante sendero.
Allá en la granja comenzó a mugir una vaca en el establo. Los mirlos comenzaban ya su canto del atardecer.
Llevaba ya un buen trecho andado y aún sin saber hacía donde ni por qué me dirigía, mis ojos se fijaron en un punto que brillaba entra la verdina y el musgo. Y allí estaba ella, la llave tanto tiempo deseada, una ilusión, una utopía, un imposible…
La llave que me habría de llevar al escenario de mi tiempo, mi otro tiempo, mi tiempo pasado.
La tomé y la arropé entre mis manos como quien acuna un tesoro, e insegura y desorientada y volví sobre mis pasos.
Ya los gorriones habían encontrado su cobijo y lo mirlos habían callado su algarabía de trinos. La niebla flotaba desde el suelo y casi me engullía.
Verdial qué bueno es dar con la llave y la cerradura deseada.
ResponderEliminarBuen texto como siempre, adornado de esas hermosas palabras, que sabes colocarlas, para darle un aire fresco y hasta de misterio a tus escritos.
un beso
Maite
P.D. Buena idea la del reproductor.
Llaves, senderos... tesoros como el hermoso cuadro que nos muestras. ¡Precioso!
ResponderEliminarQue suerte tener esa llave y saber donde meterla.
ResponderEliminarEntre tus palabras y tu música un viaje exquisito
BEsos
Y encontro usted el tesoro que esperaba, madame, o tal vez se llevó una decepcion? A veces los recuerdos y la imaginacion nos juegan malas pasadas y nos hacen construir mundos mas hermosos que la realidad.
ResponderEliminarBuenas noches
Bisous
Nunca se anda dos veces el mismo camino, dicen los dioses del tiempo.
ResponderEliminarEn tu relato se escuchan tus propios latidos, suaves todo el tiempo.
La niebla no te ha calado.
Ni los gorriones te han dicho don de estaba la puerta.
Tú eres el resultado de tus intenciones.
Perfecta escenificación.
(aunque el cuadro ayude).
Besiños.
Una llave y poder entrar en nuestro pasado y arreglar cosas que ya no tienen remedio. ¡Se han quedado tantas cosas sin decir!
ResponderEliminarUn beso y que tengas una buena semana.
El simbolismo siempre presente en tus textos cargados de magia y buen decir, nuevamente, tengo la suerte de encontrar yo, tu llave y entrar a este nuevo blog que desconocía y como todo es causalidad, mira el momento de este reencuentro ....Gracias por tus deseos que son los que deposito para una etapade vida...ya ves de larva a mariposa, un beso muy largo
ResponderEliminarEspero que hayas encontrado lo que guardaba esa llave, si es que lo querías descubrir.
ResponderEliminarUn beso
Siempre nos dejas un toque de intriga, esos puntos suspensivos en los que adivinar,imaginar...
ResponderEliminarYo también he encontrado mi llave, pero no puedo, ni debo, abrir la puerta.
¿Qué haré con lo que hay al otro lado?
Besos
Teresa
Si bueno es caminar por un sendero que aun no se ha recorrido, mejor es encontrar en el la llave que nuestra vida necesita.
ResponderEliminarPreciosas imagenes, como siempre.
Besos
Como todo lo que se lee aqui: Magnifico. Por ese camino, llamado melancolia, paseamos muchos en las tardes de invierno, cuando esa niebla en el aire nos recuerda tiempos pasados...
ResponderEliminarUn abrazo
Hay que saber esperar el desenlace que sigue a este magnifico relato...cada uno puede dar rienda suelta a su imaginación....pero la respuesta puede estar detrás de la cerradura que abre esa llave...
ResponderEliminarEsperaré....
Un saludo.
Mi querida Verdial si el texto es precioso, como siempre es especialidad en ti, no me deja jamás indiferente, esta vez, además....tenias la clave en una palabra mágica, ya me había coscado un poquito al leerte, pero cuando pinché ne el enlace de llave y lo descubrí todo, me sentííííí....igual que tú!
ResponderEliminarEstoy en esa época en que la distancia entre mis dos etapas, se hace muy patente, aynsssssss mi querida verdial, mi hija ha cumplido 23 añitos y ese hecho me ha llevado a recordar tantos momentos, si es que parece que era ayer cuando la llevaba a la guardería...¡y cualquier día!...ya llevo a mis nietos jejejejeje. Hoy me siento...muy mayor, nooooooooooooooo que queda feo, muy madura, ¡es mejor!
Muchos abrazotes y un texto chapó.
Gracias por pasarte por mis mundos, tus palabras escritas, siempre tan acertadas y cabales.
ResponderEliminarun fuerte abrazo, tesorete
Maite
La puerta que conduce a los jardines escondidos requiere de código y la clave se encuentra si estás consciente de tus latidos, felicitaciones Verdial.
ResponderEliminarun abrazo fraternal
Puertas, cerraduras, secretos, llaves, caminillos... la vida misma.
ResponderEliminarPor ese caminito quisiera meterme yo, casi siento el olor a la hierba mojada y veo la alfombra de hojas color de otoño, lo que sucede es que para mí es muy largo, está muy lejana esa etapa del comienzo y final de mi juventud.
ResponderEliminarLugares y cosas se distorsionan con el paso del tiempo.
Besos, Verdial.
Bueno, amiga, la vida es eso... La busqueda continua de cierta llave, que nos debe permitir abrir cierta puerta, que nos debe llevar a cierto lugar.
ResponderEliminarLa teoria del viaje es muy sencilla, casi simplona, pero la realidad ya es otra cosa.
Fijate que ya hace miles de años para los cambios de estado en la vida eran necesarios extrañisimos ritos simbolicos... Y realmente todos sabemos que nada de eso es imprescindible. Basta con encontrar la llave. Pero en la realidad no es cosa facil, amiga
Un fuerte abrazo
Va el viajero
ResponderEliminara lo largo del sendero;
—la tarde cayendo está—.
"En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón."
Y todo el campo un momento
se queda mudo y sombrío,
meditando.
Suena el viento
en los álamos del río.
La tarde ya se oscurece
y el camino que serpea
y débilmente blanquea
se enturbia y desaparece.
El cantar vuelve a plañir:
"¡Aguda espina dorada,
quién te volviera a sentir
en el corazón clavada"!
Saludos de Antonio No-Machado y de su perro-poeta Cisco.
Los momentos están cerrados bajo llave, los recuerdos tienen cerraduras imaginarias, y los gestos... permanecen en la memoria como candados que han perdido sus llaves.
ResponderEliminarHe leído el final.
La música es maravillosa junto a la lectura.
Besos
EStoy igual que tú... tomando caminos que estaban allí, pero no los había visto. Y por allí voy encontrándome, reconociéndome, renaciendo... en realidad naciendo en mi verdadero ser... ese que no tiene que ver con el modelo enseñado, ni con lo que debería ser... solo es lo que "quiero" ser.
ResponderEliminarBesos
No todos los caminos conducen al mismo lugar, no todas la llaves abren la misma puerta, pero tus letras nos llevan a otras letras que me recordaron el olor que descifra tu estancia, que con solo nombrar Verdial, me viene a la cabeza aun sin estar en este mundo virtual...
ResponderEliminarAbrazzzusss
pinche en la llave como aconsejas y terminé de leer tu relato, bien llevado verdial, perfecto.
ResponderEliminarUn placer leerte y saludarte
Algún dia daremos con el escondite de esa llave. De ese mundo que nos pertenece pero que solo podemos revivir con nuestro recuerdo.
ResponderEliminarAlgun dia..seguro.. podremos hacer ese viaje y regresar cuando nos plazca.
Besos.
Verdial, gracias por tus palabras escritas en mi blog, en una época de nuevo difícil para mí.
ResponderEliminarEs un placer contar contigo y tus siempres acertadas, sensatas palabras.
Un fuerte abrazo, tesorete, formas parte de esas personas de blogger especiales para mí.
Maite
P.D. Me retiro, (a mis aposentos) estoy agotada emocionalmente.
La música, la imagen, eres UNA MAESTRA de las letras... Pues sí, aunque siempre nos digan que las llaves del pasado no nos conducen a nada, es nuestro pasado el dueño de lo que somos ahora y conviene siempre echar una miradita.
ResponderEliminarAhora sí te dejo mí beso, esperando siempre siempre más.